4 pasos para transformar tu sala en una nave espacial
En la actividad “Exploremos con Mi Señal” (la cual te presentamos en un artículo anterior acerca de cómo visitar la playa de Guille y Cande sin salir de casa), los niños y sus papás también se divirtieron creando una gran nave espacial, usando la imaginación y el sofá al mejor estilo de nuestros amigos Juani y Gatón.
¿Hay algo más divertido para hacer en casa que transformar los muebles, los cojines y las sábanas en lugares, refugios y hasta máquinas voladoras? Si quieres tener algunas ideas de cómo hacerlo, lee muy bien las indicaciones que te daremos a continuación. Ponte manos a la obra, prepara tu creatividad, elige un destino y “¡a bordo tropa!”.
Paso # 1:
Lo primero que debe tener una buena nave es una cabina de control. Para hacerla, puedes buscar algunos controles, teléfonos o artículos tecnológicos que ya no se usen y darle sentido a cada uno de ellos.
Paso # 2:
Organiza los muebles de la sala de tu casa para formar el cuerpo de la nave, utiliza todas las sillas, muévelas e invita a algunos tripulantes. Recuerda que entre más grande sea tu nave, más lejos podrá llegar.
Paso # 3:
Elige algunas cobijas, sábanas y todas las telas que te puedan servir. Ponlas en orden sobre los muebles y utiliza algunos cojines para que tu nave tome forma. Es muy importante que además sea muy cómoda, al estilo de los mejores refugios.
Paso # 4:
Escoge tus mejores libros, entra a tu nave y empieza a imaginar a dónde quieres viajar. Estos serán tu mapa de navegación y tu guía, y te podrán dar consejos de los mejores lugares para visitar.
Luego de tener tu nave lista, pon a volar tu imaginación y diviértete. Puedes ambientar el espacio con la música que quieras, y decora el lugar con elementos que te hagan sentir como si hubieras aterrizado en un planetacompletamente diferente.
Una idea muy divertida que puedes poner en práctica con tus amigos o familiares es rellenar medias con elementos diferentes como cáscaras de frutas, arena, lana o hilos de tal manera que cuando metan la mano sientan que puede ser un bicho o alguna cosa desagradable de esa nueva tierra que están visitando.
¡Ah! y no te olvides de volver a poner las cosas en su lugar. No queremos que nadie en casa se enoje.
Y ahora ¿qué esperas para volar en tu nave espacial como Juani y Gatón?